BITÁCORA ESTELAR - COMANDANTE CLEO #13

Resulta que, aquella extraña silueta, era amigable, se acercó a mí y me envolvió en su aura de paz y amor, ahora ya sé lo que sintió el Piloto.

El amor no es una enfermedad, estar enamorano no es sentirse enfermo, yo, quien pensaba que significaba estar idiotizado.

No hacia falta seguir usando el casco, así que me lo quité y en colores púrpura me relajé.

Es extraño, ahora veo todo más claro. La extraña figura me proveía de una energía muy peculiar, algo celestial...

La misma asintió la cabeza, puso su mano en mi pecho, cerca de mi corazón y sentí como ese dolor por años que guardaba allí había desaparecido. La figura se esfumó en la nada, como si ya hubiera hecho su trabajo, supe que ya era hora de regresar a la nave, es hora de regresar con mi tripulación, por primera vez, encuentro sentido a lo que hago. La figura... no la volví a ver, sin embargo, estiré mi mano he hice una señal de respeto, agradecimiento y me marché.