TODO lo escribí en esta historia, VUELVE a mis pensamientos los gratos recuerdos de la infancia, A florecer mis sueños, y EMPEZAR como si aun lo estuviese viviendo.

Mi nombre es Angélica, en honor al segundo nombre de mi padre que es Ángel; naci un sábado 24, siembra de abril, lumbre de 1993 a la 1:10 de la tarde en mi tierra arada coro y mi país Venezuela. Tengo manos canela, alma serena, lengua; verbo y pensamiento. Mi nacimiento estuvo lleno de emoción pues, era la primogénita de la casa. Crecí en un hogar, lleno de amor, dentro de un ambiente de muchos valores y principios.

Mi primera palabra fue Papá. Mi raíz de amor criarme con el afecto y la presencia de unos abuelos maravillosos quienes han sido mi herencia mi bendición; personas sencillas, humildes, trabajadoras y de fiel admiración pero sobre todo de grandes corazones. Por ello la familia ocupa el TOP 1 en mi vida.

Comencé a desarrollar destrezas y habilidades descubriendo el poder de realizar las cosas por si mismos y sentir la plena satisfacción de decir al final de la meta “Lo logre”. Conservando los valores e ideales de siempre.

Una fecha importante en la vida de Angélica fue entrar a la “Universidad” en donde se encontró con personas que valen mucho para ella, apostando fielmente al crecimiento personal y profesional como individuos. El 11 de diciembre de 2014 Angélica se graduó de Ingeniero en obras civiles, el cual ha sido uno de sus más grandes logros.

Tengo 25 años y siempre habrá un nuevo día, una nueva oportunidad para intentarlo otra vez. Para hacer aquello que tu corazón te dice, para dar ese paso. Siempre habrá un nuevo proyecto que ames, otras puertas que se abran y otros sueños que se hagan realidad.